Un solo movimiento al azar será necesario para que el desorden comience. Se conoce la estrategia. Se sabe que hay una única forma de ganar. Pero habrá disturbios, distracciones y olvidos, que puedan alterar el correcto desplazamiento de las piezas. Decide jugador, comienza el juego. Tan solo un error, y habrá que empezar de nuevo. Pero para ello, una vez más, deberán acomodarse las fichas sobre el tablero.
Las fiachas estan tiradas...conozco la consigna pero no el camino, conozco mi intención pero no mi destino...a veces elijo otras quedo sorprendido...pero siempre vuelvo al mismo pensamiento; en definitiva...que importa todo esto, si lo que que vivo es un juego, entonces me relajo y dsifruto del momento y ahi descubro que justamente por esa misma simplicidad sin causa, sin apuros...soy digno del objetivo de un observador amigo!
ResponderEliminarGracias TINNO QUERIDO!
linda devolución, gracias quien hayas sido! igual algo me imagino
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