
Vacío el sitio que tantas esperas acompañó. Vacío aquel que oyó las más intensas disertaciones. Vacío el que dedicó su tarde a que dos manos se entrelazaran. Vacío quien sostuvo las más fuertes agonías y pesadas lágrimas, como el otro que gozó con las más gratas sonrisas. Hoy vacío. ¿Será que ha llegado su momento de esperar, de disertar, de entrelazar sus manos, de agonizar y llorar, de sonreír...? ¿Será que dijo
"ya basta de otros tantos, ahora yo"? Y de lejos se lo ve quieto, inmóvil. Aunque en su interior otro es su pasar.
Es un sentir triste, que espera su momento, el de disfrute!...
ResponderEliminarA él tambien le tocara participar de una relacion de dos, al ver y sentir las experiencias ajenas, le genera un movimiento interior al que podra aprender a estar con un otro en algun momento, de poder ser protagonista...su clave es, ser cauto...
¿Cuando sera?, ¿hasta cuando aguantara en la soledad y el vacio?
...No creo que mucho... ya espero y sufrio demaciado...
Un abrazo!, excelente labor!...
León
Impecable realización de claroscuro
ResponderEliminarEn un ambiente solitario toma fuerza desmedida y protagónico quien fue el sostén indudable de
incontables protagonistas.
Las sombras embellecen el motivo y
dejan entrever una sutil desambigua
ción, confusa, sospechada quizá,
pero con la convicción de poder
continuar haciéndolo.
Gigio
cool blog
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